En esta comunidad hay bastante muchachos que les gusta el deporte, dice Pérez, incluso tenemos la escuela Antonio José de Sucre, donde también puedan recibir clases sus alumnos. 

Los techos que habían pegado hace más de cinco años, y que no terminaron de colocar; desapareció. Sólo quedan las estructuras metálicas, el esqueleto. El piso de la cancha parece una hojilla, por lo filoso de las piedras que sobresalen del pavimento, los tableros no sirven, no hay demarcación de las canchas de las tres especialidades (Baloncesto, Voleibol y Futbolito); ni pensar en baños, gradas e iluminación. Nunca han existido. 

Los deportistas del sector, a veces tiramos una caimanera, pero han salido varios heridos en los pies; otros con los zapatos destrozados. 

Así mismo podemos denunciar que algunos vecinos toman los alrededores del lugar como depósito de basura, los indigentes lo toman para hacer sus necesidades; es decir, el concepto de cancha deportiva no existe en el barrio. Nosotros hacemos jornadas de limpieza, tratamos de colocar un poco de mezcla de cemento para el piso; pero no es suficiente. Necesitamos ayuda. 

Por esta vía hacemos un llamado a las autoridades municipales, al gobernador del estado, para que le pongan la mirada a la cancha del barrio 12 de marzo, al lado de Ciudad Losada. Terminó diciendo el zurdo. 

//Jean Carlos Rodríguez 

Especial para semanario Ecos Web